—¿Estamos ya en Pueyrredón? ¿Cuánto falta?
Tiene el tono de voz más alto y pronunciado que cualquier otro pasajero.
Nosotras nos miramos las caras, inseguras de si responder o no.
—¿Estamos ya en Pueyrredón? ¿Cuánto falta?
Tiene el tono de voz más alto y pronunciado que cualquier otro pasajero.
Nosotras nos miramos las caras, inseguras de si responder o no.
Yo tenía catorce años cuando hui de casa, mamá era un fastidio y no me dejaba salir. Veras yo era medio gótica y no creía encajar en esa puñetera familia. Todo fue muy gracioso, mi novio me fue a recoger a eso de las nueve de la noche ¡quién sabe para dónde! Y yo que quedo con esa cara de sorprendida, pero todo bien, después de lo que paso en el colegio lo más prudente fue salir corriendo antes de que amaneciera porque seguramente los señores del aseo revisarían los lavabos y entonces encontrarían todas las travesuras que hicimos los dos, sin embargo yo no me fui con él hasta que empaqué mi maleta. Guardé dos
Tenía que llegar hasta el océano. El chico lo sabía, aún no podía explicarlo por su edad, pero intuía claramente que no tenía otra opción. Sin ataduras de tipo alguno que obstaculizaran su camino. Sin adultos mentados mamá o papá a quienes dejarles una nota de despedida. ¿Cuál sería el camino más corto? Se preguntaba sin dejar de moverse en línea recta, su sabiduría de seis años sabía perfectamente que la recta es el camino más corto entre dos puntos.
Desde que tengo memoria, hace muchos años, me levanté del suelo de ajedrez. Soy un peón guerrero de los más legendarios. Llevo bastante tiempo en la insurgencia. Incluso ahora, libro una batalla iracunda contra los enemigos. Audaz, actúo con valentía con tal de defender a la reina negra. Durante la lucha he
El mundo es un vampiro.
The Smashing Pumpkins- Bullet with butterfly wings.
Johnny estaba sentado en el estrecho balcón fumando un cigarrillo para que su madre no lo regañase. Miraba los autos transitar por la avenida. Desde el año 84 estaban viviendo en los bloques de La Ciudadela 20 de
En la laguna de Soustons, a las dos de la tarde, remando. De repente, fui fulminado por un giro trivial de vocabulario: All is of no avail (nada sirve para nada). Si hubiera estado solo, me hubiera arrojado instantáneamente al agua. Nunca he sentido con semejante violencia la necesidad de acabar con todo.
Para mí, Ernst era la sensibilidad personificada, tenía un encanto y una agudeza irresistibles; un conocimiento del mundo, su color, sus estratificaciones desde sus orígenes, varias culturas que expresaba tan vívidamente en sus fotografías…
SIGNO DE FUEGO
Aquí, donde entre mares surgió la isla
como un ara de ofrenda inesperada,
aquí, bajo un negro cielo
enciende Zaratustra sus fuegos que se elevan, —
señales de fuego para naves perdidas,
Javier Rabadán se dirigía a reunirse con su amante espoleado por una inquietud difusa. Por primera vez, en cuatro años, se había saltado las normas, las reglas de hierro que él mismo se había fijado y cuya estricta observancia le había permitido conllevar –y disfrutar- aquella espléndida doble vida. Nunca
antes le había dicho a su esposa que iba a estar en un determinado lugar -la clínicaDetrás de bastidores
se esconde un juego de óleos derramados
allá los pinceles rotos
desgastados
se acumulan sin consecuencias
hoy has venido a colorear lienzos vacíos
como si de una primavera en tinta se tratase
En el vasto escenario de la naturaleza y la destructiva influencia del hombre, surge la "Vindicación del Caos" de Alberto Jiménez...