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'Conversaciones con Kafka', por Gustav Janouch

Ya no me acuerdo de las veces que estuve con Franz Kafka en la oficina. Sin embargo, hay algo que sí recuerdo muy bien: su postura cuando, media hora o una hora antes de terminar su jornada de trabajo, yo abría la puerta de su despacho en el segundo piso del edificio del Instituto de Seguros contra Accidentes de Trabajo. Lo hallaba sentado tras el escritorio, la cabeza echada hacia atrás, las piernas extendidas y las manos inertes sobre el tablero. El cuadro de Filia El lector de Dostoievski

'El buitre', relato de Franz Kafka

Un buitre me estaba desgarrando los pies a picotazos. Ya había destrozado las botas y los calcetines y ahora me desgarraba los pies. Después de cada picotazo que me daba, se ponía a volar inquieto, describiendo círculos en torno a mí. Luego proseguía su tarea.

"Franz Kafka": Un cruzamiento"

Tengo un animal peculiar; es mitad gatito y mitad cordero. Es parte de mi herencia paterna. Se ha desarrollado, pero tuvo que llegar a estar en mis manos para hacerlo. Antaño tenía más de cordero que de gatito; ahora tiene de los dos a partes iguales.

La cabeza y las garras son de gato; el tamaño y la figura, de cordero. De ambos son unos ojos centelleantes y salvajes, un pelaje suave y tupido, unos movimientos que tienen tanto de brincos como de lento deslizarse. Al lucir el sol, cuando está sobre el alféizar, se ovilla y ronronea. En la pradera corre como un loco y

Carta a un joven poeta | Por Rainer María Rilke


Era en 1902, a fines de otoño. Estaba yo sentado en el parque de la Academia Militar de Wiener Neustadt, bajo unos viejísimos castaños, y leía en un libro. Profundamente sumido en la lectura, noté apenas cómo se llegó junto a mí Horacek, el sabio y bondadoso capellán de la Academia, el único entre nuestros profesores que no fuera militar. Me tomó el libro de las manos, contempló la cubierta y movió la cabeza. "¿Poemas de Rainer María Rilke?", preguntó pensativo. Y, hojeando luego al azar, recorrió algunos versos con la vista, miró meditabundo a lo lejos, e inclinó por fin la frente, musitando: "Así, pues, el cadete Renato Rilke nos ha salido poeta..."

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Vindicación del Caos · por Alberto Jiménez Ure

En el vasto escenario de la naturaleza y la destructiva influencia del hombre, surge la "Vindicación del Caos" de Alberto Jiménez...