Estos relatos recorren ciudades, habitaciones, estaciones, bares cerrados y zonas donde la realidad y la ficción se cruzan. Algunos caben en un párrafo; otros se despliegan en varias páginas. Hay fragmentos, diálogos interrumpidos, cuerpos en tránsito, encuentros y despedidas.
Cada texto forma parte de este archivo en movimiento. Voces que escriben desde Montevideo, Huelva, Matanzas, Valencia, Nueva York, Barcelona, o desde cualquier lugar donde el Kaos insista en aparecer.