—Las cosas malas nunca te las dicen.
—Lo que les voy a contar no me sucedió a mí, pero si a una amiga. Siempre he pensado que lo más peligroso es la soledad, la cual nos puede llevar a sobrepasar los límites de nuestra propia razón. Existe gente que los vemos tan normales en el exterior, pero tan solos que dan vida a sus máximos compañeros y amigos en forma de Tulpas. Mi amiga sentía tanta soledad que me lo empezó a contar como una opción. Yo le decía como puedes pensar eso, eres joven, bonita, tienes un buen trabajo, no te desesperes pronto llegará. En mi afán de saber lo