En la ciudad egipcia de El Cairo, Aleister Crowley, acompañado por su esposa, Rose Kelly, comenzó a recibir un extraño mensaje de una entidad que se hizo llamar Aiwaz. Esta entidad le dictó a Crowley los tres capítulos que conforman «El libro de la ley» en tres noches consecutivas: 8, 9 y 10 de abril de 1904. En este post rescatamos algunos de estos mensajes alterando su orden.
I13. Estoy arriba de vosotros y en vosotros. Mi éxtasis está en el vuestro. Mi goce es ver vuestro goce.