Yo podría caerme de destino en destino pero siempre guardaré el recuerdo del cielo.Vicente Huidobro
Verano. Calor sofocante. La finca ocupada por obreros y pintores. Vecinos molestos. Nada que hacer. Sin trabajo. Solo en casa todo el día. Una novela que tal vez no se escriba nunca. Una mujer que te quiere y una amiga que te excita. Esta historia no puede acabar bien. Y más si tú amiga, una auténtica mujer fatal, guarda un secreto inconfesable y peor aún si tu mujer está dispuesta a hacer lo que nunca esperarías de ella. Y el miedo a tus deseos. El miedo a la felicidad… ¿Qué hacer? ¿Por qué pelear? Ese es el dilema…