'El diario de Porfiria Bernal', de Silvina Ocampo
A Juli
Pocas personas creerán este relato. A veces habría que mentir para que la gente admitiera la verdad; esta triste reflexión la hacía en la infancia por razones fútiles, que ya he olvidado; ahora la hago por razones trascendentes. Las personas consideradas honestas, son muchas veces las insensibles, las que no se conmueven ante un destino complejo, o las que saben con sumo sacrificio o habilidad
Xu Lizhi: poesía de un trabajador de Foxconn (1990-2014)
"En mi lecho de muerte"Quiero mirar otra vez al océano, contemplar la inmensidad de lágrimas de media vidaQuiero trepar otra montaña, intentar recuperar el alma que he perdidoQuiero tocar el cielo, sentir ese azul tan ligeroPero no puedo hacer nada de eso, así que dejaré este mundoTodos los que oyeron de míNo deberían estar sorprendido de mi partidaAún menos deberían suspirar o afligirseEstaba bien cuando vine, y bien cuando me fui.
'Palabras para Julia', de José Agustín Goytisolo
Tú no puedes volver atrás
porque la vida ya te empuja
como un aullido interminable.
Hija mía es mejor vivir
con la alegría de los hombres
que llorar ante el muro ciego.
Te sentirás acorralada
te sentirás perdida o sola
tal vez querrás no haber nacido.
Yo sé muy bien que te dirán
que la vida no tiene objeto
que es un asunto desgraciado.
'Un poema crece inseguro en la confusión de la sangre', de Herberto Helder
(De “PHOTOMATON & VOX”)(walpurgisnacht)Yo no duermo, apenas respiro como la raíz sombríade los astros: raya la laceración sangrienta,estancada entre el sexoy la garganta. Yo nuncaduermo,con la herida de mi propio sueño.A veces muevo las manos para sostener la luz que salta
'A la doble que soy', de Lauren Mendinueta
Hay fotografías en las que no me reconozco.Mi yo cobarde al mirarlasme obliga a pensar que existo en una solay no en la suma de quien soycon esa otra que me suplanta en la imagen.Cuesta creer que la desconocida también soy yoesa mujer suspendida y fea
Novela: 'Melancolia de la resistencia', de Lásló Krasznahorkai (fragmento)
Y con esta agudeza no sólo veía la afinidad entre propiedad y propietario, sino también el profundo parentesco que existía entre la calma sepulcral de la sala y el frío sin vida del exterior: como un espejo inexorable que siempre muestra lo mismo, el cielo reflejaba con indiferencia la desolada tristeza que manaba de abajo, y los castaños deshojados, envueltos en un gris cada día más sombrío, se inclinaban bajo un viento
Poemas: 'Cuando el niño era niño y... poesía', de Peter Handke
Cuando el niño era niño andaba con los brazos colgando,quería que el arroyo fuera un río,que el río fuera un torrente y que este charco fuera el mar.Cuando el niño era niño no sabía que era niño,para él todo estaba animado
Dos poemas de Lawrence Ferlinghetti
Poema XIEl mundo es un hermoso lugarPara nacerSi a Ud. No le importa que la felicidadNo siempre seaTanta diversión
Joan Didion | Noches azules (fragmentos)
" ¿Por qué experimenté, entonces, una sensación tan intensa de traición al cambiarme el permiso de conducir de California por otro expedido en Nueva York? ¿Acaso no era una transacción perfectamente natural? Se acerca tu cumpleaños, tienes que renovarte el carnet, ¿qué más da dónde lo renueves? ¿Qué más da que hayas tenido el mismo número en el permiso desde que te lo asignó el estado de California cuando tenías quince años y medio?
'El oso en una calle de Delhi', poesías de Earle Birney
Desde la Rama del AvellanoConocí a una señoritaen una calle casi desiertaojos de avellanay pequeños pies de algodónsus piernas nadaban cercanascomo una amorosa truchasus ojos eran árbolesdonde los muchachos se recostabanmanos en la oscuridad y
Poema: «La tercera dimensión» y «Estadias en el mundo paralelo», de Denise Levertov
Quién me creeríasi dijera, “ Me agarraron yme abrierondel cráneo a la entrepierna, ytodavía estoy viva, yme paseo complacida con
Poemas inolvidables de Gwendolyn MacEwen
Poemas en Braille
Itodas tus manos son verbosahora tocas mundos y sientes sus nombres-a través del objeto hacia el nombreno en el sentido inverso (en inviernoYo soy Midas, mi nombre es oro)la silla y la mesa y el librose extienden desde tus dedos;todos tus movimientos
Poema: «Olvidando», de Vahan Tekeyan
Olvidando, sí, me olvidaré de todo.Uno después de otro. Los caminos que he cruzado.Los caminos que no crucé. Todo lo que ocurrió.Y todo lo que no ocurrió.No voy a seguir transportando,ni arrastrando el pasado silencioso, o ese "yo"que era más hermoso y más grandede lo que jamás podría haber sido.
Dos cuentos de Dino Buzzati
Una muchacha que cae
Con despecho comprendió que una treintena de metros más abajo otra muchacha caía. Erasin dudas más bella que ella y llevaba un vestido de media tarde con mucha clase. Quién sabe por qué, la otra descendía a una velocidad muy superior a la suya, hasta el punto que en pocos instantes la distanció y desapareció allá abajo, a pesar de los llamados de Marta. Sin duda iba a llegar a la fiesta antes que ella; tal vez era un plan calculado de antemano para suplantarla.
'Sredni Vashtar', relato de Hector Hugh Munro 'Saki'
Conradín tenía diez años y, según la opinión profesional del médico, el niño no viviría cinco años más. Era un médico afable, ineficaz, poco se le tomaba en cuenta, pero su opinión estaba respaldada por la señora De Ropp, a quien debía tomarse en cuenta. La señora De Ropp, prima de Conradín, era su tutora, y representaba para él esos tres quintos del mundo que son necesarios, desagradables y reales; los otros dos quintos, en perpetuo antagonismo con aquéllos, estaban representados por él mismo y su imaginación. Conradín pensaba que no estaba
Raymond Carver | Vecinos
Bill y Arlene Miller eran una pareja feliz. Pero de vez en cuando se sentían que solamente ellos, en su círculo, habían sido pasados por alto, de alguna manera, dejando que Bill se ocupara de sus obligaciones de contador y Arlene ocupada con sus faenas de secretaria. Charlaban de eso a veces, principalmente en comparación con las vidas de sus vecinos Harriet y Jim Stone. Les parecía a los Miller que los Stone tenían
Selección de poesía | Jeton Kelmendi
Acortando distanciasDespués de la noche de hoyDisfrutando de la mañana.Después del mañanaDe vuelta a otra noche.Estoy más cerca de ti.Yo y tú, nos soñamos.
Dos poemas de 'Mariné Petrossian'
SE TERMINÓ TODO
Quiero que nieve tantoque yo me sorprendame sorprenda tanto queno pueda hablarno pueda caminar
que nieve tanto
Poema: «Porque fui todas las cosas», de Lorna Goodison
Porque fui todas las cosas...Porque fui todas las cosasespíritu salvajeabadesaMagdalena.Ahora inicio el orden de la graciame hago dueña de la llave de las posibilidades.Todo lo que no soporto ver, o lo que adoroen otros, está en mí.