«Silencio», un relato de Arlen Macías

Mordía el borde de mi labio, me hacía parecer que estaba en un juego de muecas. El tiempo estaba estático a mi lado, tenía la vista en el suelo y el pensamiento agotado. Sobre los hombros sólo podía sentir el frío del vacío mental que comenzaba a cobrar la factura de los quince meses en los que habíamos estado jugando a las escondidas. Hoy al despertar, al ver el manojo de telarañas, al terminar el rompecabezas que formaban las grietas alrededor de mi cabeza, escuché en mis adentros - ¡arriba basura! - Entonces, entendí que tendría un compañero difícil este día.

Sabes, hay momentos en los que el cuerpo se divide de la mente, es decir, la mente pide un descanso, un momento de salir y despejarse, pero el cuerpo, el tan egocéntrico e inquieto cuerpo hace lo que viene en gana. Estuve pensando en escribir una novela, un libro, siempre tengo ideas en mente para ello y nunca logro pasarlas al papel, al final las clasifico como algo que haré después o que escribiré en una nota rápida, ¿a quién quería engañar?

Es cierto, no es mi día, el almuerzo no fue diferente, los olores no se hicieron presentes, la carne sabía a carne y el agua a agua. Sí, regresaré a terapia, aunque en el fondo sé que volveré en un par de semanas después de la última sesión. Estoy herido amigo mío, herido que me siento como una hoja arrugada tirada en medio de la calle en el primer día de otoño, una hoja que todos los que pisan cerca la toman, abren con alguna esperanza y al verla con la ilusión rota la dejan en su lugar. 

¿Es la carencia de emociones lo que me lleva a esto? ¿Es la vista absurda lo que te acompaña al vacío? ¿Son los rasguños del pasado en los que fui formado los que ahora me tienen contra el suelo? ¿O simplemente es el polvo de la historia lo que me mantiene mareado y sedado en un espiral de personas? 
He mordido lo suficiente para hacer que el tibio pedazo de piel sangre como si estuviese lleno de rencor. Llagas es lo que queda. Y sé que, al punto final, me olvidaré de todo.



Arlen Macías, 19 años, México,  estudiante de historia.

Photo by Photos_frompasttofuture on Unplash (public domain).


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