Desde México: una muestra poética de Víctor H. Orduña “Shamir”

Claustrómetro

Habito desde hace siglos en mi gigantesca garganta,
perdido en pulmonares estruendos, 
como un musgo bronquial entre inmateriales dobleces,
como un pez contemporáneo
sobre las aguas fetales,
como una espina quirúrgica
que inocula ancestrales dudas,
como un diagnóstico
extraviado en los expedientes 
de la contralluvia,

de los tristeados desvelos,
de los dolorientos encierros,
de las amarguéricas fluideces.

Toso la cronología amarillenta de los meteoros,
 mimetizado con las paredes que sintonizan las trivialidades,
gripeo uno a uno los recuerdos post uterinos,
las palabras ultra acuáticas,
y me desvanezco aturdido 
bajo burocráticas insensateces,
esperando una panacea milagrosa 
que me devuelva el gen de humanidad,
el código inmune de alegría 
que destilan 
los girasoles. 
Permanezco abrazado a este esófago antropomórfico,
a esta traqueal tragedia
a esta comedia laríngea  
que a cuenta gotas 
oxigena las tardías manipulaciones.

¡Auxilio! ¡Auxilio!
grito 
mientras me neumonizo,
grito 
mientras carbonizan mi identidad,
grito 
mientras agito mis alas de escarabajo,
grito 
mientras a nadie le importa,

grito, grito, grito,
mientras 
 el mundo me cierra la puerta en la cara. 



El cruel verdor del Hombre Increíble  

No he venido hasta aquí por un susurro. 
Quiero oírte gritar.

Hulk.

Ahora entro a tu habitación como un tornado,
tu habitación que es también tu cuerpo,
y te tocó la cara con las manos mutantes,
soy el musgo radiactivo de tus fragmentados labios,
la fuerza supernatural donde 
las enormidades 
se multiplican.

Ahora dialogo en guturales tonos, 
y me desdoblo en irregulares musculaturas,
son tus curvaciones las que me trastornan,
las que me rompen,
las que me roban el control, 
las que me trasforman 
en la indecible creatura morbosa.

Se desorbitan mis ojos al roce de tu descomunal temperatura,
la bruta corpulencia 
no me cabe en la ropa,
todo sucede en micro bits de oscuraciones,
sobre salvajísimos  movimientos
que destellan. 

Me he convertido en un monstro,
te he convertido en mi presa,
no sé si matarte o matarme,
o si debo volarle al destino los sesos.

Dejaré en algún multiverso 
este incontenible verdor de besarte,
para no correr el riesgo de ser tu amante,
tu amante mutante
y también tu asesino.



Víctor H. Orduña “Shamir” (Tamaulipas, México, 1983) Licenciado en Ciencias de la Comunicación con Maestría en Metodología de la Enseñanza; cantautor, fotógrafo, artista visual y poeta. Ha participado en diversas antologías y revistas literarias tanto digitales como impresas. Primer Lugar Estatal del Poetry Slam 2019 en la Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil. Es catedrático de diferentes universidades. 


ILUSTRACIONES: El retrato ha sido remitido por el autor de las obras.


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