Desde Alicante: «Las Francis», un relato de Miguel Ángel Pacho

PRÓLOGO: Quedan 7 días para que acabe este curso, ¡que gozo y que alegría, por dios! Os sitúo en el espacio, para que os ubiquéis… Dichos eventos que contaré se suceden en el colegio LAS FRANCIS, donde la comida es radiactiva, ¡sin coñas! A continuación os narraré, desde mi punto de vista, lo que sucedió el último mes de dicho curso escolar, a la vez que os iré contando anécdotas y analizando los distintos personajes que aparecerán en la historia del colegio, incluido yo mismo. 

A falta de una semana para que acabase el tiempo lectivo, a 13 de Junio, antes del verano, sucedió un suceso raro de cojones… por no calificarlo de paranormal, por lo menos. Dicho suceso se fue gestando en el comedor del colegio, durante varios días, años mejor dicho, en las horas del mediodía, destinadas a la alimentación y esparcimiento de los jóvenes. Había un eslogan conocido popularmente por niños y jóvenes que acudían a dicho servicio escolar que decía lo siguiente: “Si comes Coes la sopa te sabrá a rayos, así que no te rayes”. Y por dicha “sopa” u cualquier otro alimento de dicho servicio, bebida o condimento, o la mezcla de todo a la vez, un día Alex “Calvinichi” calvo se quedó, pero ¿de verdad…? Me explicaré: primero… ¿qué es Coes? Pues bien, Coes no es otra cosa que la empresa de suministros y logística alimenticia que proveía a distintos colegios de la zona de alimentos, bebidas, útiles de cocina etc… Lo segundo: Alex, es decir Alejandro, un chaval conocido por “Calvinichi”, ya que acostumbraba a raparse continuamente la cabeza desde la primaria… Tras quedarse calvo a falta de más menos una semana de curso, en principio se sospechó de la comida, y más adelante veremos si dichas sospechas eran acertadas o no... Es en este punto donde comienza la trama de la historia que nos ocupa, pero antes de continuar con la misma. Volveremos un mes en el pasado en este mismo colegio...

Mes de Mayo, día 20. A falta de un mes más para finalizar el período escolar…Nuestro curso era 4º de la ESO en el colegio las FRANCIS. Las aulas desde la primaria estaban divididas por cursos en 2 clases: la A y la B. Mi curso, o sea, 4º de la ESO, también tenía A y B, yo me encontraba en la B, al igual que mi buen amigo Alex, de quién ya sabéis un poco…Eran clases idénticas, la división únicamente era por motivos de espacio entre aula y aula. 

En la pizarra se escriben problemas y ecuaciones, no las entiendo pero si las invento. Con un 5 me basta, para llegar a fin de curso limpio en todo y pasar al siguiente. Era lo que siempre pensaba haciendo deberes y exámenes. Mis peores asignaturas eran las ciencias lógico-científicas: Física, Química y Matemáticas. Todas ellas impartidas por José Luis, Joselu para los amigos y chavales más descarados, quién tenía unos conocimientos de dichas materias increíbles. Al mismo nivel que su capacidad para enseñarlas y transmitirlas a sus alumnos. Además de ser un gran amante de los guateques y los combinados. 

Os seguiré hablando de los distintos personajes envueltos en este desastre de colegio, para que vayáis empatizando o simplemente horrorizándoos del percal… Es el turno de los 3 niños del coro. Sí, parece broma pero no lo es… Javi 1, con una voz angelical, Gerardo con un tono de opera que ni Pavarotti, y Javi 2 que les imita casi a la perfección gracias a su agudo oído e instinto musical. Estas 3 voces combinadas hicieron al coro de las FRANCIS el más famoso y aclamado de la ciudad, que por cierto… era Alicante. Dato no muy relevante en este relato, pero que es interesante que lo sepáis, por las dudas que os puedan surgir…

Tantas historias tantas anécdotas antes de alcanzar el punto crítico de dicha narración, que no sé por cual continuar… ¡Ah, sí! Ya sé qué contaros ahora…Alicia siempre invita a Sergio “el Santo”, a ir a la Iglesia. Ya que el mote de este sugiere de entrada como si fuese muy religioso o por lo menos muy buena persona, pero un razonamiento muy alejado de la realidad… Dicho mote surgió por el hecho de que Sergio siempre mentía en todo, hasta en el más mínimo detalle. Y lo mejor de todo para los que lo conocíamos en el colegio era que sabíamos perfectamente su actuación, y él, pobre infeliz, creía que nos engañaba a todos de verdad…En resumidas cuentas, y siento lo ofensivo de mi aclaración: estos 2 eran los más tontos del curso, de 4º de la ESO. Y si me apuras te diría que incluso del colegio… 

Es el turno de nuestro triángulo amoroso escolar. Pues bien: Iván, mi mejor amigo estaba prendado por Carla. Chica alta, rubia, ojos azules, deportista…os podéis hacer una idea vamos…Desgraciadamente para mi buen colega, a Carla le gustaba Eric. Un chico rubio, ojos azules…etc. Y a Eric le gustaba Iván, ¡qué noooo! Eso último era coña, pero sería muy gracioso, ¿verdad? Los lazos tenebrosos en los que nadie queda solo. La pregunta es: ¿mi amigo conseguiría a la chica de sus sueños antes de acabar el curso? Lo sabremos al final del relato…

En cuanto a “mi vida amorosa”, la chica que me gusta de mi curso, María, me dice friki porque me gusta el manga y el anime japonés, y además canto canciones del género. No obstante, yo ya soy feliz con tan solo oír como su voz se dirige hacia mí, y me siento tan infame como José Ramón, el malo del cole. El cual cuando se dirige a mis amigos o a “mi chica” en malos términos me pongo chulesco en plan justiciero. Llegando muchas veces a los golpes incluso. Sí, lo sé, debería ver menos ficción…

En lo que respecta a los rumores y chismorreos del colegio y en particular el 4º curso de la ESO, Laura y Alba eran las mejores (cotorras) en lo suyo. Se cuentan secretitos al oído, y por lo bajo, sobre todo lo que se cocía en el colegio e información sobre todos los que lo integraban. En gran parte, todo lo que os estoy contando lo sé gracias a ellas. Además de contrastarlo todo antes de darlo por conocimiento cierto y fiable. Por otro lado, Pedro y Juanfran fanfarronean de sus pisos. Ya que uno tiene una gran central de ordenadores y cableado tecnológico que ni Steve Jobs. Mientras que el otro posee un jacuzzi, una sauna e incluso una mini-taberna en un sótano con un billar. Raúl, otro buen amigo mío, aparece, ¡y a todos se la mete! En sentido figurativo claro. Pero aun así… todo el rato se la pasaba dibujando penes por doquier: pizarras, libretas, paredes…Así que os podéis hacer una idea del personaje…

¡Basta de vanas divagaciones! Volviendo a la trama central de esta historia que iniciaba en el prólogo…A 28 de Mayo, Alex empieza a notar cambios en su estado físico y mental. Tras años de ingesta continuada, 5 días a la semana, de la comida del comedor escolar, no me extraña…Sentía malestar, jaqueca, nauseas…Además de mayor pérdida del bello corporal, mucho más de lo normal…sobretodo en la cabeza. ¿Signo de calvicie? A sus tan solo 15 años de edad sería pensar un poco extremo, pero no se descartó en ese momento…Más adelante seguiré con esta línea crítica del relato…

Típico Ralph “el Divino” Hueso que cuenta sus teorías de Dios y la vida que a todos nos fascina. Aunque no entendemos ni jota. Gran profesor de ética y religión del colegio. Todo un personaje, otro más… Miguel y Jonathan, los deportistas, los basketbolistas mejor dicho, que meten el balón en la canasta de la fantasía y la imaginación. No sé qué más contar de estos 2 así que pasemos a conocer a 4 profesores más: Pablo Paya era el profe mamado de Educación física, para él, la frase “mente sana y cuerpo sano” era su lema, bonito y práctico, pero muy típico. Otro Pablo, Pablo García, profe de Biología, con teorías sostenibles y humanistas muy interesantes. Aunque me volvían un tanto loco demás… Llegué a pensar que los seres humanos debíamos dejar de existir para que el planeta no se fuese a pique...Y hoy en día ese pensamiento no está muy lejos de la realidad, compartido por muchos además... Pero bueno… este tema no va en esta historia... Es el turno de nuestras 2 profesoras de inglés: Carmen Pérez, simpática y con acento inglés. Y por otro lado, Carmen Gracia, con mucho carácter y acento americano. Poco más que comentar de estas dos… 

Sergio Ribero sabe que nada es color de rosas, ya que su afinidad por los hombres le pasa factura en un entorno de cuervos. Si no me habéis entendido… os lo explicaré fácil y sencillo: gay. En cuanto a Cecilia y Malena eran las fumadas de pesca, las “drogatas” del cole vamos…Y con las tres Marías, las analíticas del periódico escolar, se los apuestan, los porros, en una encuesta sobre drogadicción. Paradójico, ¿cierto? Lo sé. Así de loco y bizarro es este centro escolar: LAS FRANCIS. 

Claudia, Inés y Camila, son las 3 amigas súper inseparables del cole. Van a comprar siempre juntas, visten igual, sacan las mismas notas… Por otro lado; Carlos el mongol, quién nunca ha aprobado un examen e iba a clases especiales, era el único alumno que las tenía, pudo pasar de curso hasta la primaria por este sistema, pero, en 1º de la ESO repitió y le tocó con nosotros. Poco más que decir de este sujeto “torpe mental”, con todo el respeto. Se disputaba el puesto del más tonto con Sergio y Alicia.

A 1 de Junio, entrando ya en el último mes del curso y el primer día de comedor del mismo mes. Ese día, un Lunes por cierto, tocaba comer arroz con sushi, o debería decir arroz solamente…Día “japonés” en el comedor con productos de muy dudosa calidad…Lo que debería ser sushi, más bien era un trozo de pescado poltrañoso, y el arroz era seco y duro, hasta el punto de parecer estar mordiendo piedrecitas. Mejor no comento más detalles sobre la supuesta “comida” porque divago por la rabia y el asco que le tenía…Casi ninguno de los que íbamos al comedor: Alberto, Raúl, Iván, Juan, yo incluido…comimos ese día como muchíiiiiisimos otros días a lo largo de años. Todos excepto nuestro sujeto estrella del relato: Alex. Él comió, y repitió, de este “sushi”, y el resultado, obvio para mí, fue que al día siguiente, 2 de Junio, no vino a clases…

3 de Junio. Alex seguía en casa recuperándose de su malestar tras la ingesta de esa aberración de pescado del pasado día…En el patio del comedor, algo así como el recreo entre la comida y las clases de la tarde, jugábamos a deportes y juegos variados, pero el más popular y divertido para todos no era otro que: los Sanfermines. Os explico: era un juego que consistía en que una persona al azar hacía de “toro” y perseguía al resto que huían de él, a través de un largo corredor, de unos 3m de ancho, conexo a la salida del comedor. Si “el toro” te pillaba (rozándote con cualquier parte de su cuerpo en el tuyo) eras eliminado. Y así hasta que solo quedaba uno: o un jugador o el toro. Y al día siguiente, después de “comer” jugábamos otra partida con mucho entusiasmo y devoción. Ese deporte en verdad debería volverse un deporte olímpico, ¡qué tiempos aquellos!

Alba Capar y Jorge Bernar, con Ana, la profesora de Historia, la asignatura de Sociales casi les quedo... Ya que una creía que la Pangea aún existía y que la Tierra era plana, no por falta de inteligencia, sino más bien por terquedad e incredulidad; y el otro afirmaba rotundamente que todos los avances españoles, desde los descubrimientos de Colón hasta la invención de la fregona eran solo catalanes…Sin comentarios... Juan era el delegado de mi clase a la vez que delegado estudiantil del AMPA. La asociación de padres y alumnos del colegio. Los que organizaban eventos y demás actividades escolares fuera del horario lectivo…Igual sobraba esta explicación, ¿no?

8 de Junio, justo una semana después de la intoxicación de Alex. Quien por cierto, volvió por fin a clases “totalmente” recuperado de su malestar previo. No obstante, no solo fue el caso aislado de mi amigo calvo, sino que a partir de esa primera semana del mes…se hicieron visibles varios casos similares, y todos ellos apuntaban, casi seguro, a la comida del colegio… Pues bien, el lema popular del comedor que ya mencioné a principio del relato es el contrapunto del lema oficial de los responsables de marketing de la industria alimentaria de Coes, que dice así: “Si comes Coes, comes bien”. Un lema cuanto menos irónico, ya que no solo que si comes su comida te envenenas, si es que a “eso” se le puede llamar comida claro… sino que además te sale migraña como mínimo en pocas horas… El aumento de casos desembocaría en un final fatal para la vida de…

 

Antonio y Mari Cruz, 2 profes más del colectivo LAS FRANCIS. Antonio “el que Canto”, era el profe de música, se le conocía por ese apodo porqué una vez cantó y no dejó de llover en toda una semana… ¡Qué va hombre! ¡Eso es imposible! Simplemente es que canta fatal y punto. En cuanto a Mari Cruz, la profesora de valenciano, que mentía más que pinocho y hasta con cosas sin sentido, como que el valenciano es un idioma oficial y no un dialecto, por poner un ejemplo.

A la hora del recreo de mediodía, entre las 3 primeras horas de clases y otras 2 antes de salir a comer, junto a Iván y Kike solía simular peleas de los dibujos japoneses que veíamos en la tele en esos días… Y molestábamos a Sergio y Alberto, sin llegar al punto de abusar de ellos, porque todos éramos amigos. Pero a ellos no les gustaba mucho eso de “pelearse de broma”, y algo sí que les molestaba que los involucrásemos en nuestras “peleítas”. En cambio, nosotros 3 nos lo pasábamos de miedo lanzándonos golpes al cuerpo, tirándonos al suelo, haciendo tacleadas etc… Unos jóvenes locos de remate, en pocas palabras. 

Estoy divagando demasiado, ¿verdad? Estaréis pensando, aparte de que soy un pesado de narices con tanto relleno que os estoy contando… que es un espectáculo de cole donde los haya… Además de raro de cojones. Este gran y espectacular colegio: LAS FRANCIS. ¡Bueno! Ya queda poco de historia y narración por mi parte. Así que no desfallezcáis en la lectura, ¡por favor! 

10 de Junio. En uno de tantos recreos en las que me la pasaba “jugando” a las peleas con mis amigos…Estaba yo tan tranquilo y sosegado practicando una técnica marcial, que aunque sacada de la ficción, de una serie animada en concreto, bastante famosa la verdad, que seguro que conocéis la mayoría…De un niño con cola de mono que volaba por los cielos con una nube voladora y lanzaba fuegos por las manos, algo así…Pues resulta que estaba yo ejecutando una técnica de dicha serie la mar de bien, hasta culminar está en el golpe final, que consistía en que con ambas manos unidas con las palmas abiertas daba un golpe simultaneo al objetivo, que recibió uno de los que estaba conmigo en ese momento, y lo tiró para atrás bruscamente un metro y poco. Lo mejor de todo, a pesar de lo espectacular del instante, es que para mi suerte…me vio una profesora haciendo dicho “espectáculo”. Parte grave o muy grave, no recuerdo bien el nivel de la norma o varias que infringí con ese “mal acto”. Bueno… no dejaba de ser una agresión a un compañero, aunque, consentida, en parte. Conllevando la respectiva expulsión de 3 días en casa. Triste final para mí.

Se me olvidaba mencionar un pequeño detalle con respecto a nuestro alocado colegio: era un colegio religioso, concretamente de monjas. Sor Fari “la silenciosa”, Sor Esper “la diabólica”, Sor Ursu “Sor Verru”, Sor Rosa “la piadosa”…y muchas otras. Unas más calladas que otras, unas más malas o menos simpáticas…Pasaban por nuestras vidas escolares como fantasmas. En realidad no influían mucho en nuestro hábitat, pero eran una presencia curiosa que hacía más especial si cabe este centro escolar, cuanto menos.

Mientras pasaba mis 3 días de castigo en casita metido…Pensé en toda mi historia en el colegio, donde crecí y me formé hasta hoy. El período de Infantil donde lo único que hacía era jugar. Yo y todos, claro. Durante la Primaria me costó empezar a leer porque me parecía aburrido y hacía muchas gamberradas. Y por último, en Secundaria, donde me encontraba en el presente, que nunca acaba… seguía haciendo gamberradas…La prueba irrefutable de ello era mi situación actual de expedientado en la cara. Pero bueno…Un tiempo de reflexión le viene bien a cualquiera, y más aún a un chaval rebelde e inconformista como yo. Aproveché dicho castigo para mejorar y madurar como estudiante y persona. O eso quería pensar al menos. Al día siguiente regresaría a mi querida escuela: LAS FRANCIS…

13 de Junio, este día se convertiría en el gran sueño de más de la mitad de cualquier estudiante del planeta, en especial de nosotros, los adolescentes. Y es que debido a un súper incidente que se llevaba tiempo gestando en nuestro centro escolar…nos darían vacaciones de verano una semana antes de lo esperado. Tras mi regreso a clases, pude observar a primera hora de la mañana que todos estaban muy alborotados y consternados. Cuando pregunté el motivo y me lo contaron, por una parte me sorprendí y preocupé; por la otra me sentí aliviado y feliz. Resulta que mi amigo Alex, se quedó calvo del todo hacía un par de días, y en el presente se encontraba en coma en el hospital de Alicante. Y no solo él, varios alumnos se encontraban con síntomas iniciales parecidos a los que tuvo él al principio de esta historia como os relaté. Ayer, los padres de Alejandro, habían denunciado al colegio y pedido que investigasen el motivo de aquel cambio y malestar en su hijo. La misma mañana de mi regreso varios inspectores de sanidad evaluaron minuciosamente el comedor escolar, de cabo a rabo, y como todos ya sabíamos desde hacía años interactuando con dicha comida y servicios…NO cumplía las condiciones mínimas de sanidad, ambientales e higiénicas adecuadas. Por lo cual cerraron dicho “comedor” indefinidamente… Y sancionaron al colegio a una multa cuantiosa. Se especulaba dentro de nuestro entorno que rondaba los 100.000€…Por todo ello, y a tan solo una semana de finalizar el curso…nuestra directora pedagógica anunció por megafonía a todos los cursos, desde Infantil a Secundaria, que dicho curso escolar lo daba por finalizado ese mismo día, 13 de Junio, con carácter urgente y extraordinario. 

Pasaron las horas, pasaron los días…el verano entraba tan radiante como el sol de mediodía. Hay que aprovechar los bellos momentos que nos ofrece la vida, o el inspector de sanidad… pues todos y cada uno de ellos acaban más temprano de lo que uno piensa… Con nuestras vacaciones anticipadas, los alumnos de 4º de la ESO de LAS FRANCIS, decidimos montar una cena y fiesta de fin de curso el día 20 de Junio, día correspondiente al verdadero día final de curso programado. Nos despediríamos de todo y todos para ir a bachillerato a otro centro, algunos comenzarían a trabajar, a estudiar un módulo, o simplemente vivirían su vida como mejor les conviniese… 

Llegó el día señalado, el 20 de Junio. Era ya de noche, cerca de las 21h. Cenamos en un italiano, típico pero efectivo, y no demasiado caro. Antes de acabar de comer brindamos por Alex y todos los estudiantes que habían caído enfermos por la “comida del diablo” del colegio. De camino a la fiesta, en los barrios de la periferia, cada uno hablábamos de cosas triviales: de la cena, del futuro, de quien se iba a liar con quien…Prometía ser una noche inolvidable desde luego…

Para acabar, que intuyo que ya tendréis ganas… si es que habéis siquiera llegado hasta este punto de la historia…os contaré muy por encima lo que les sucedió a algunos personajes de los cuales he hablado en algún momento del relato. Comencemos: Joselu, el profe de Mates y Ciencias, viendo el futuro incierto del colegio tras el incidente del comedor, abrió un local nocturno junto a su mujer para servir piscolabis y tocar música country. Los 3 niños del coro consiguieron fama a nivel nacional gracias a colgar sus canciones en “youtube”, y a raíz de eso los llamaron para cantar en multitud de iglesias y conciertos privados del país. Ganando más fama aún… 

En cuanto al tan enmarañado triángulo amoroso escolar…Mi buen amigo Iván no consiguió a la chica. Pero no cejó en el empeño de encontrar pareja, y le dio una oportunidad a una buena chica que también le hacía tilín, de un curso inferior al nuestro, y se hicieron novios. Hablando de amores…el mío se quedó en dique seco, ya que por mi parte no di el importante paso para ello. No obstante, me despedí con un gran abrazo y una alegre sonrisa de ella… antes de separar nuestros destinos… Ralph, el profe de Religión, se ordenó diácono, y ello no le impidió formar una familia con su mujer y tener 2 hijos. 

Miguel y Jonathan llevaron a su equipo de basket a las finales provinciales y casi ganan. Pero sin importar el resultado del partido final, un partido apoteósicamente épico según lo relatan los hechos, crearon un precedente para futuras generaciones… 

Cecilia y Malena fueron pilladas con más de 30g de cocaína. Fueron multadas, además de ser obligadas por las leyes a ir a un centro de desintoxicación. Las 3 Marías seguirían informándose y formándose en su carrera periodística. No me extrañaría verlas algún día en algún telediario de la tv o ver alguno de sus nombres en algún artículo de periódico, narrando noticias interesantes. Una de las Marías empezó una relación con Juan, el delegado. Parece que aún siguen juntos… 

Carlos el mongol siguió siendo igual de tonto. No volvimos a oír noticias suyas… Alba Capar y Jorge Bernar lo tuvieron crudo para superar la asignatura de Sociales de Ana. Pero esta, al final fue misericordiosa, y por no hacerles repetir 4ºcurso de la ESO solo por una asignatura…hizo la vista gorda, aprobándoles a ambos a finales de Junio. 

Del resto de profesores nada más que añadir. Seguirían dando clases si el colegio volvía a abrir sus puertas…Y por último, las monjas. No sé cómo estarán, ya que no he vuelto por ahí… Pero me imagino que seguirán viviendo en el cole aunque esté cerrado, y les irá bien seguro.

EPÍLOGO: Una cosa más antes de acabar definitivamente el relato… Espero que Alex, mi buen amigo, se recupere pronto, y su pelo, también…

Miguel Ángel Pacho. Alicante, España. Graduado en Derecho. Finalista Concurso Valenciano Jóvenes Talentos Edición 2012.

Correo electrónico: miguel-camino@hotmail.com

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